Por: Thomas Karig
Del 16 al 18 de octubre se llevó a cabo aquí en Puebla, en el Centro Expositor de los Fuertes, la ExpoTransporte, que es la exposición bianual de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones, ANPACT. Para nosotros en Puebla, que estamos tan enfocados a la industria del automóvil, es interesante echarle un ojo al sector de vehículos pesados, que también ha tenido un buen desarrollo y tiene su peso específico dentro del sector industrial de México.
La ANPACT agrupa a 14 empresas, desde las que tradicionalmente identificamos como las camioneras que son Mercedes, Volvo, Scania, Freightliner, International, Kenworth, MAN y la renacida DINA, hasta los nuevos jugadores entre los que están Volkswagen Camiones, Isuzu, Hino y Mack. Y también forman parte de este grupo los fabricantes de motores pesados a Diesel, Cummins y Detroit Diesel. En el caso de Volkswagen, algunos recordarán que los camiones se empezaron a ensamblar aquí en Puebla, pero después la fabricación se integró a la planta de MAN, también parte del Grupo Volkswagen, en Querétaro.
Esta industria fabricó 177 mil vehículos en 2018, y exportó 148 mil, un 84%, muy similar al porcentaje que tienen los fabricantes de automóviles. En la comparación internacional, México se coloca en cuarto lugar como país exportador y en sexto lugar como productor, otra vez una posición idéntica a la industria de vehículos ligeros.
Para los autobuses y camiones el mercado interno de México juega un papel importante, incluso más que para los automóviles. Casi todo el transporte de personas, y una gran parte de la carga, en México se mueve con camiones y autobuses. Pero el mercado está estancado desde hace algunos años, en 40,000 vehículos pesados que se venden en México al año. Hasta 2008 se llegaron vender 50,000.
La venta de autobuses y camiones está relacionada, más todavía que los autos, a los ciclos económicos y la dinámica de crecimiento de la economía. Y esta dinámica ha estado ausente en México. Otro tema con el que batallan los camioneros es la importación de vehículos usados de Estados Unidos, que, si bien se ha controlado, ha dejado su huella en un parque vehicular obsoleto y plagado de vehículos que son inseguros y contaminantes. Al igual como en los autos, aquí hace falta una acción más decidida del gobierno.
Un tema que preocupa a los camioneros y que el gobierno tiene que resolver es la disponibilidad de Diesel de Ultra Bajo Azufre (UBA) en todas las gasolineras del país. Todos los camiones operan con motores a Diesel, y la norma mexicana de emisiones requiere que los vehículos pesados incorporen a partir de 2021 un control de emisiones equivalente al de Estados Unidos o Europa. El problema es que estos motores no funcionan con otro combustible que no sea UBA, y si PEMEX no puede asegurar el suministro, habrá que atrasar nuevamente la aplicación de esta norma, algo que perjudica no solamente la salud de las personas, sino también el avance tecnológico de esta industria tan importante para México.
Por cierto, fue un logro para Puebla que la Expotransporte se viniera a Puebla, después de que durante muchos años se llevó a cabo en Guadalajara. La exposición tuvo 46,831 visitantes, un 4% más que la última de Guadalajara, lo cual confirma que Puebla se consolida como un destino atractivo para este tipo de evento. Dentro de todos los temas que preocupan a la industria, esa es la buena noticia.
