La plataforma mexicana de crowdfunding, Business Angels, se prepara para ser un ente regulado conforme los lineamientos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores por la nueva Ley Fintech.

La Ley Fintech regula las plataformas dedicadas al financiamiento e inversión, servicios de emisión, administración y transmisión de pagos electrónicos.

Los requisitos que marca la nueva regulación dan certeza los inversionistas en torno a la legalidad y licitud de las operaciones, así como el origen de los recursos, con el fin de evitar fraudes o lavado de dinero, entre otros fenómenos.

Una gran parte de las plataformas de financiamiento colectivo desarrollan inversiones, en especial en el manejo de la información, transparencia y autentificación de los inversionistas, lo cual implica nuevos procesos de registro y certificación de la identidad de quienes participan en estas plataformas.

Los modelos de inversión en casos como Business Angels permiten coinversiones en franquicias con aportaciones relativamente bajas y que resultan por su rentabilidad sumamente atractivas con respecto a otras opciones, tanto de inversión como de financiamiento para los negocios en formación.

Asimismo, el riesgo se dispersa gracias a la cooperación colectiva al sumarse a un determinado proyecto.

Sin embargo, el proceso de financiamiento colectivo es confiable cuando suma a marcas de prestigio, con éxito repetitivo y responsabilidad como las franquicias, marcas reconocidas por su solvencia económica y ética.

En ese contexto, cabe mencionar que las cuatro figuras que contempla la regulación de la Ley Fintech son financiamiento colectivo o crowdfunding, criptomonedas como el bitcoin, API o intercambio de información entre instituciones, así como regulación sandbox o de prueba.