“El IMSS va a ir con el chisme con la Secretaria de Trabajo y le va a decir estas empresas hay que ir porqué están generando brotes epidémicos (de Coronavirus)”.

Así lo resumió el director de prestaciones sociales y económicas del IMSS, Mauricio Hernández, al presentar los lineamientos para el retorno a la nueva normalidad, donde puntualizó que a la propia Secretaría de Trabajo le corresponde ir a vigilar y presionar, aunque reconoció que el universo es de más de un millón de establecimientos y se requiere de su solidaridad.

El funcionario del Seguro Social presentó los esquemas para el retorno a la nueva normalidad de cara a la pandemia de Coronavirus, con modelos para que se registren cadenas de transmisión en las empresas y presentó ejemplos diversos.

De paso advirtió que muchas empresas con actividades no esenciales nunca suspendieron actividades, “siguen trabajando y generaron contagios”.

Hay que tener bien controladas las empresas de las cadenas de transmisión, por ejemplo una empresa generó 160 contagios, reveló.

En México país, el primer caso de Coronavirus se presentó el 28 de febrero y el primer fallecimiento el 18 de marzo.

Por ello, ante el regreso a actividades se busca evitar grandes picos que provoquen que se apague la industria, crear un balance que incluye minimizar cadenas de contagio en el ambiente laboral y el fortalecimiento de la cobertura médica, dijo Hernández.

Informó que se construyó un tablero que le permite al IMSS vigilar el curso de la epidemia.

Dio a conocer que se han registrado 23 mil 965 empresas esenciales y neo esenciales a la Plataforma Nueva Normalidad, 13 mil 160 corresponden a construcción, cinco mil 995 a fabricación de equipo de transporte, dos mil 357 en minería y el resto a industrias originales.

Además, se promueve la capacitación de trabajadores, que suma 519 mil inscritos y una eficiencia terminal del 80 por ciento.

Para el IMSS prevalecen beneficios como la recuperación económica, empleo e ingreso, fortalecimiento de seguridad social, pero también riesgos por una reemergencia de infecciones, de manera que hay que evitar la saturación de hospitales.