La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción en Puebla consideró factible el desarrollo de “Rifas” para la asignación de obras públicas con montos menores, con el fin de abrir la posibilidad de participación de pequeñas empresas del sector.

El presidente de la CMIC Puebla, José Antonio Hernández González, adujo que la medida ya ocurre en Aguascalientes, Guanajuato y Querétaro, siendo un factor que ha permitido inhibir la corrupción en la asignación de proyectos por invitación u otros esquemas.

No obstante, destacó, el sector público puede blindarse de deficiencias en la ejecución de las obras por los constructores al mantener la aplicación de fianzas de vicios ocultos.

La idea, abundó, es dar obras a las empresas locales, democratizar los trabajos y estimular la economía, además de abatir los riesgos inherentes a la corrupción.

Reiteró que se puede blindar el proceso vía fianzas, que hoy en día suman la garantía de un año por vicios ocultos tras la entrega recepción de los trabajos conforme la Ley de Obras Públicas, aunque el plazo podría ampliarse en función de las especificaciones de los proyectos construidos, por ejemplo, en vialidades de concreto.

En ese sentido ilustró que algunos concretos hidráulicos en Puebla capital se encuentran con fallas en Esteban de Antuñano, Circuito Interior, 25 y 31 Poniente Oriente, no obstante se dijo que esa tecnología tenía garantías de 20 a 30 años.

Hernández González apuntó la urgencia de que el próximo legislativo local desarrolle una nueva Ley de Obra Pública estatal que se sume a otras de vanguardia como las de Jalisco y Nuevo León, con un combate expreso a los “moches” que perjudican la calidad de la obra pública en un abierto combate a la corrupción.