Con el compromiso de ayudar a las personas con sobrepeso y obesidad a lograr un peso más saludable, y con ello prevenir y contribuir el control de enfermedades asociadas como la diabetes tipo 2, el Programa Allurion - de reciente introducción en nuestro país- superó los más de 100 mil pacientes tratados exitosamente en México y el mundo, convirtiéndose en el programa médico más innovador, confiable y seguro para el control del peso a largo plazo.  

De acuerdo con la encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018: Resultados Puebla, en el estado siete de cada diez adultos presentan sobrepeso y obesidad, siendo esta última de mayor prevalencia en las mujeres que en los hombres, representando un alto riesgo para el desarrollo y agudización de enfermedades como diabetes tipo 2, males cardiovasculares, algunos tipos de cáncer, problemas digestivos, artritis, apnea del sueño, hígado graso y ovario poliquístico, entre otros.

El sobrepeso y la obesidad tienen un impacto en la salud, la autoestima, la apariencia física e incluso en la vida sexual. Sin embargo, muchas personas pasan del entusiasmo a la frustración cuando a pesar de buscar una solución para disminuir su peso - con dietas, ejercicio o suplementos - no logran conseguirlo. 

Con presencia en más de 60 países,  el Programa Allurion consiste en un revolucionario abordaje a través del uso del primer y  único balón gástrico ingerible del mundo - que no requiere cirugía, ni endoscopia, ni anestesia para su colocación y extracción- junto con un programa integral de estilo de vida saludable, el cual ofrece seguimiento médico y nutricional personalizado -con apoyo de herramientas digitales- para lograr una pérdida de peso aproximada de entre el 10% al 15% en un programa de 6 meses de duración y promover su mantenimiento a través de nuevos hábitos de vida, expresó Alejandro Lira,  médico especialista en cirugía bariátrica y robótica del Hospital Ángeles de Puebla.

En ese sentido, el Programa Allurion al lograr una disminución promedio del 10% al 15% del peso corporal en sus pacientes, proporciona una herramienta efectiva para reducir la hemoglobina glucosilada (HbA1c) y contribuir en la remisión tanto la prediabetes como la Diabetes Tipo 2, aunado a los demás beneficios de salud que conlleva la pérdida de peso, agregó el especialista.

Este punto es muy importante, dado que en los últimos años han aumentado los casos de obesidad y diabetes en el estado, como lo refiere el documento “Radiografía de los padecimientos atendidos en el estado de Puebla 2021”, realizada por el Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM), el cual destaca que durante 2021 el estado de Puebla registró un incremento del 43% en obesidad y 24% en diabetes mellitus tipo 2 en población adulta, enfermedades que frecuentemente suelen presentarse en los mismos pacientes, con más riesgos para su salud.

Alejandro Lira explicó que el procedimiento para la colocación del Balón Allurion se realiza durante una breve consulta ambulatoria de alrededor de 15 minutos, donde previa evaluación aprobatoria y bajo la supervisión de un equipo médico, el paciente ingiere una cápsula que contiene el balón gástrico unido a un delgado catéter. Tras confirmar mediante una primera radiografía que el balón se encuentra en el estómago, se llena con 550 mililitros de solución estéril y se verifica su correcta colocación a través de una segunda radiografía.

“A partir de ese momento, el espacio que ocupa el balón en el estómago inducirá la pérdida de peso al incrementar la sensación de saciedad, retrasar el vaciado gástrico y reducir la cantidad de alimentos ingeridos en cada comida. Y una vez transcurridas aproximadamente 16 semanas, el balón se vacía automáticamente y se evacua de forma natural, sin ninguna complicación”, precisó.

Si bien la presencia del Balón Allurion en el estómago es un elemento importante en la pérdida de peso, el programa consta de la supervisión y seguimiento por 6 meses, acompañado por un equipo multidisciplinario, entre ellos médicos y nutriólogos, que ayudarán al paciente a establecer un estilo de vida saludable que evite nuevamente el incremento del peso.