Las mujeres se vieron afectadas por el COVID-19 porque disminuyeron sus ingresos y perdieron su empleo a lo largo del 2020 y en el inicio de este año en América Latina y el Caribe.

De acuerdo con estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ña tasa de desocupación regional de las mujeres en 2020 aumentó de 10.3 a 12.1 por ciento, con ello, aproximadamente 1.1 millones de mujeres se incorporaran a las cifras del desempleo femenino, para llegar a un total de 13.3 millones.

Ante el panorama, la OIT recomendó que los planes de recuperación del mundo del trabajo tras la pandemia de COVID-19 deben incluir medidas especiales para favorecer la reincorporación laboral de las mujeres.

En el caso particular de México, un 15 por ciento menos de mujeres que hombres forman parte del sector laboral formal y solo una de 4 personas a cargo de negocios con más de seis trabajadores son mujeres.