Para personal no sindicalizado, el incremento salarial para el próximo año será de 6.5 por ciento - 7.5 por ciento a nivel nacional y abril será el mes con mayor prevalencia para otorgar aumentos, según un estudio de Aon plc.
De acuerdo con los resultados de su Encuesta de Compensación para personal No Sindicalizado y Sindicalizado (TCM – LCM) 2022, la cual permite obtener un parámetro de las tendencias de mercado sobre el entorno, las regiones del país, la zona Bajío tendrá un incremento promedio de 7.1por ciento, la zona norte de 6.9 por ciento, mientras que, por industria, el sector de alimentos contará con el porcentaje promedio más alto de incremento con un 7.4 por ciento.
Respecto al personal sindicalizado, los resultados arrojan que a nivel nacional las empresas estarán otorgando en 2023 un aumento de 7.2 por ciento - 8.0 por ciento en salarios y un 0.6 por ciento en prestaciones. Los meses con mayor prevalencia para la negociación de los contratos serán enero (23 por ciento) y febrero (19.7 por ciento). Entre las principales prestaciones que se negociarán se encuentran el fondo de ahorro, aguinaldo y prima vacacional.
En cuanto al reparto de utilidades, el 89.8 por ciento de la muestra pagó el PTU sin aplicar el tope de la reforma, es decir, pagó el monto integro. El 10 por ciento aplicó el promedio de 90 días de sueldo base, siendo $50,720 el monto promedio en pesos. Asimismo, el 80 por ciento presentó un incremento promedio de 130.5 por ciento. Del 25.4 por ciento de la muestra que no otorgó PTU, implementaron un bono sustituto de PTU de 27 mil 084 pesos en promedio.
Una de las estrategias de las empresas para mitigar el impacto financiero, derivado de la reforma en materia de subcontratación, es buscar un equilibrio entre la compensación variable a través de bonos por resultados y el pago del PTU, de ahí que el 29.4 por ciento de la muestra se encuentren rediseñando sus modelos de compensación variable, tanto para el personal de ventas, ejecutivos y operativos; donde los principales ajustes se enfocan a la actualización de las métricas con base al entorno actual.
Según el estudio, solo el 1.1 por ciento de la muestra a nivel nacional planea, en el futuro, mantener al 100 por ciento el esquema de teletrabajo, donde la Ciudad de México tiene la mayor prevalencia con un 4 por ciento. El 44.3 por ciento de la muestra a nivel Nacional, planea de manera híbrida (40 por ciento o menos del tiempo de trabajo desde casa), la Zona Bajío cuenta con una prevalencia mayor para aplicar este esquema con un 52 por ciento, CDMX con 46 por ciento Zona Norte con un 28 por ciento.
“Las reformas laborales en nuestro país cambiaron por completo el paradigma y estructura del mercado laboral en México, lo cual, ha traído ajustes en las organizaciones corporativas. Aunque el entorno del trabajo actual es completamente diferente al de hace un par de años, los resultados son alentadores; las organizaciones se han priorizado con resiliencia las necesidades de sus colaboradores a través de mejores beneficios, capacitación continua, mayor cobertura en cuestiones de salud física y mental, por ello, de suma relevancia seguir trabajando en los retos de subcontratación, teletrabajo, bienestar y temas sindicales en el país”, comentó Rocío Hernández, directora de Compensación para México en Aon.
La muestra estuvo conformada por 476 empresas participantes a nivel nacional, de las industrias Automotriz y autopartes, Manufactura, Alimentos y Bebidas, Energía y Oil & Gas, entre otras.
