Por segunda vez en menos de un año, los inspectores federales de seguridad en el lugar de trabajo descubrieron que un fabricante mundial de baterías para vehículos eléctricos -SK Battery America Inc-, exponía a sus empleados a graves riesgos de seguridad y salud en su planta de Commerce, después de que los trabajadores sufrieran daños respiratorios potencialmente permanentes en un incendio de una batería de litio en octubre de 2023.
SK Battery America Inc., una filial de SK On, emplea a unas tres mil 100 personas en dos plantas de fabricación de baterías en Commerce.
SK On es parte del Grupo SK, con sede en Seúl, el segundo conglomerado más grande de Corea del Sur con empresas que operan en las industrias de energía, materiales avanzados, biofarmacéuticos y digitales.
Después de que los investigadores de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional del Departamento de Trabajo de EE. UU. se enteraron del incendio en SK Battery America Inc., determinaron que la compañía no capacitó a sus empleados sobre cómo protegerse adecuadamente en la atmósfera tóxica que dejó a varios trabajadores heridos. La agencia citó a SK Battery por cinco infracciones graves después de descubrir que la empresa hizo lo siguiente:
Expuso a los trabajadores a peligros por inhalación, incluidos los vapores de ácido fluorhídrico producidos en incendios de baterías de litio, al no establecer un plan completo de respuesta a emergencias.
No se aseguró de que su agencia de personal, Moveret Inc., que suministró trabajadores al sitio, informara a sus empleados sobre los peligros asociados con los incendios de baterías de litio.
No capacitó a los socorristas de emergencia en el sitio ni a los miembros de la brigada de bomberos sobre los peligros asociados con los incendios de baterías de litio ni los equipó para tratar a los empleados expuestos a dichos peligros.
No capacitó a los trabajadores sobre productos químicos peligrosos en sus áreas de trabajo ni sobre medios para protegerse de incendios de baterías de litio.
No se realizaron pruebas de ajuste anuales a los trabajadores que debían utilizar respiradores con máscara ajustada.
OSHA ha evaluado a la empresa $77,200 en sanciones propuestas, una cantidad fijada por el estatuto federal.
