Banco de México reportó la balanza pagos 2021, la cual refiere que la cuenta corriente registró un déficit de 4 mil 866 millones de dólares y se reporta un aumento de los activos de reserva por 10 mil 288 millones de dólares.

La debilidad de la demanda interna en México durante el último trimestre de 2021 se vio reflejada en un superávit de la Cuenta Corriente que sumó 3 mil millones de dólares, si bien en el acumulado anual se ubicó en 4 mil 866 millones de dólares, cifra equivalente a 0.4 por ciento del PIB, en contraste al superávit de 2.4 por ciento en 2020.

Entre 2020 y 2021, la Cuenta Corriente pasó de un superávit de 26 mil 200 millones de dólares, a un déficit de 4 mil 900 millones de dólares, mientras que la Cuenta Financiera disminuyó de un préstamo neto en la cuenta financiera de México al resto del mundo del resto del mundo de 22.1 mil millones a 3 mil 86 millones de dólares.

Banxico detalló que la actividad económica mundial se recuperó durante 2021 de manera heterogénea entre sectores y países, en un entorno de desbalances entre la oferta y la demanda ante los persistentes cuellos de botella en las cadenas de suministro y las restricciones a la movilidad asociadas con repuntes en los contagios derivados de nuevas variantes del virus SARS-CoV-2.

Informó que la reducción del saldo de la cuenta corriente reflejó, principalmente, la importante disminución del superávit de la balanza de mercancías no petroleras y la ampliación del déficit de la balanza de mercancías petroleras, lo que fue parcialmente contrarrestado por el dinamismo que continuaron mostrando los ingresos por remesas y un mayor superávit de la cuenta de viajes.

Ponderó que los avances en los niveles de vacunación y la mejoría en las perspectivas económicas
contribuyeron a que los mercados financieros internacionales registraran en general un
desempeño favorable a lo largo de 2021, aunque con episodios de volatilidad derivados de la
incertidumbre asociada con la evolución de la pandemia y su impacto sobre la recuperación
económica global, el significativo aumento de la inflación y la expectativa de un retiro más
acelerado del estímulo monetario a nivel global.

En este entorno, durante 2021 el saldo agregado de la cuenta financiera significó un préstamo neto de México al resto del mundo derivado, principalmente, de la evolución de la inversión de cartera y de los activos de reserva, si bien la economía mexicana continuó captando recursos por concepto de inversión directa y de otra inversión.