Laptos, televisores, cerraduras eléctricas y cámaras se encuentran entre los dispositivos con los que se ejerce algún tipo de violencia, así como diferentes abusos contra las mujeres en sus hogares.

De acuerdo con investigación realizada por Avast y Refuge, para la mayoría de las personas, los dispositivos inteligentes ofrecen comodidad en el hogar y, aunque fabricantes como Amazon, Google y Apple toman precauciones para mitigar el abuso, en las manos equivocadas, los dispositivos IoT pueden usar dispositivos conectados a Internet para dañar y ejercer control sobre sus víctimas.

La investigación revela cómo se utiliza esta tecnología en situaciones de abuso: poco más de la mitad, 64 por ciento de las mujeres en el Reino Unido tienen el control de administración de los dispositivos en sus propios hogares; una de cada cuatro, 27 por ciento declaró que el acceso de administración de estos dispositivos no se ha compartido de manera equitativa o con transparencia en su hogar; y el 18 por ciento de las mujeres dijo que no tienen control sobre la configuración de Wi-Fi en su casa, pero su pareja o miembro de la familia sí.