Una mejor remuneración económica, aumentar las posibilidades de crecimiento y un mejor equilibro entre empleo y vida con sus seres queridos, son las claves para que una empresa logre un mayor nivel de retención de los empleados.

De acuerdo con el estudio UKG “Renunciar o Resignarse? Los trabajadores mexicanos comparten la difícil experiencia de renunciar a su trabajo durante la pandemia”,  líderes hubieran querido retener a sus empleados; sin embargo, el problema es que los esfuerzos que realizan los gerentes para retenerlos no parecen funcionar, ya que están mal orientados o no están realmente conscientes de lo que significa ya no contar con ese talento.

Cuando una persona se va, provoca un desbalance en los equipos de trabajo y una sobrecarga importante para sus compañeros en lo que se logra contar con el reemplazo, además la curva de aprendizaje puede durar hasta 3 meses, generando mayor estrés y agotamiento en los que se quedan sin contemplar el costo económico que representa.

El 43 por ciento de las personas que renunciaron por un mayor salario en otra empresa, se hubieran quedado si se mejoraba sus beneficios, y el 39 por ciento indicó que, si se le hubiera ofrecido un aumento de salario, también se hubieran quedado. 

En los últimos años se ha visto como el burnout está aumentando cada vez más, al grado que el 31 por ciento de los encuestados mencionan que renunciaron por buscar un mejor equilibrio de vida y trabajo.