Volkswagen se encuentra en un proceso para el realineando de su división de Desarrollo Técnico de Wolfsburg, lo que implica convertir a la unidad de ingeniería más grande del Grupo, con once mil 500 empleados, en un área que marque el ritmo de la transformación de la marca  en una empresa de tecnología.

El énfasis principal está en un rediseño total del proceso de desarrollo, haciéndolo interdisciplinario, centrado en el software y en las necesidades del cliente, en la plataforma eléctrica del futuro de Volkswagen, y en funciones más que en componentes individuales.

Se espera que esto reduzca el tiempo de desarrollo en aproximadamente una cuarta parte, aumentando la velocidad de las nuevas versiones de software y acelerando significativamente los procesos de manufactura en la producción. Desarrollo Técnico se convertirá así en un pilar importante de la transformación del desarrollo para el Grupo.

“Si el automóvil se está convirtiendo cada vez más en un producto de software impulsado eléctricamente, entonces su desarrollo también debe evolucionar en todas las dimensiones. Estamos haciendo que Desarrollo Técnico esté más conectado y sea más eficiente al enfocar nuestros procesos y organización en los sistemas y las funciones en lugar de en los componentes. Primero el software en lugar de primero el hardware. Esto nos permitirá reducir los tiempos de desarrollo en un 25 por ciento: en el futuro, los proyectos vehiculares se completarán en 40 meses a partir del punto en el que se encuentre la arquitectura básica de software, en lugar de 54 meses como antes”, dijo Thomas Ulbrich, miembro del Consejo administrativo responsable de Desarrollo Técnico.

La transformación también estará presente fuera del Grupo con el centro de desarrollo Campus Sandkamp previsto para Wolfsburg, en el que el grupo invertirá 800 millones de euros en hacer de Campus Sandkamp el centro de desarrollo vehicular más vanguardista del mundo.

El nuevo proceso de desarrollo se enfocará en las funciones y los sistemas más que en los componentes. Conocido como ingeniería de sistemas, este es un enfoque común de los proyectos de desarrollo complejos de la industria, como la construcción de aeronaves. En la década de los noventa, el desarrollo vehicular se centró principalmente en los componentes.

A medida que se agregaron funciones y sistemas electrónicos a principios de la década del 2000, la conectividad comenzó a jugar un papel cada vez más relevante. Ahora y en el futuro, el vehículo debe ser visto como un solo sistema en el contexto del ecosistema completo del cliente y comunicarse sin problemas con todos los sistemas fuera del vehículo.

Se indicó que Volkswagen está reduciendo los tiempos de desarrollo en un 25 por ciento; en el futuro, los proyectos de vehículos se terminarán en 40 meses en lugar de 54 meses como antes. Al trabajar estrechamente con Producción, Desarrollo Técnico contribuye significativamente a la fabricación con procesos optimizados, aspirando a lograr un tiempo de producción posible de alrededor de diez horas por vehículo.

Además, los colaboradores ya se han capacitado para nuevos campos de trabajo en Desarrollo Técnico, y miles más se capacitarán también en los próximos años. Para 2030, cerca de cuatro mil empleados serán preparados para asumir nuevos perfiles de trabajo, mientras que se mejorarán las habilidades de entre seis mil a ocho mil mediante una capacitación amplia.

De igual forma, el Grupo utilizará en el futuro, la plataforma conocida como SSP (Scalable Systems Platform) para 2026 en el proyecto Trinity de Volkswagen y eventualmente fusionará las actuales plataformas MEB y PPE. Esto hará que la SSP sea la base de todas las marcas y modelos —es decir, la base para más de 40 millones de vehículos del Grupo— y permitirá que Volkswagen refuerce su posición como líder de plataformas. Al igual que MEB, la SSP también estará abierta a proveedores externos.